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Creo que no me queda más que aceptar la despedida...
Ya no hay vuelta atrás...
Se va a ser parte de ese pasado que nunca me perdono... irónico... ya me imagino los martes de domino con los fantasmas de mi vida...
No hay nada más que perdonar, nada más porque pedir perdón...
Creo que empieza a desprenderse, hay una esquinita despegada, tal vez en un día o dos le pueda dar un jalón y se acabó...
Adiós amor... adiós...